EL PUEBLO
La villa de Caballar se asienta sobre un antiguo castro romano y se tiene conocimiento de su existencia desde el siglo XII, cuando la reina doña Urraca entregó la población al obispo de Segovia junto con Turégano. En aquellos documentos aparece con el nombre de Cova Caballar o Cavallar (del Latín CABALLUS, caballo de carga) al existir en la zona un abrigo natural que era utilizado como refugio de caballos. Esta denominación ha derivado con el tiempo hacia el nombre actual: Caballar.